miércoles, 9 de marzo de 2011

Cerrar las puertas


cerrar una puerta requiere de muy poco esfuerzo, un poco de fuerza y el querer salir o entrar a un lugar... pues bien, me pregunto si cerrar una etapa cera tan fácil como cerrar una puerta, se necesita fuerza, y también se necesita querer terminar una etapa, y si es tan fácil, porque se nos hace tan difícil a veces. ¿Que hay que no nos permite dar vuelta la pagina de un día para otro?, quizás si podemos, pero no queremos, entonces nos faltaría fuerza. Es difícil tomar la determinación de terminar con algo para siempre, mas si ese algo te marco, ya sea de felicidad, o de angustia, si fue importante es difícil dejarlo atrás. Pero por qué tanto, si en realidad basta con no hablar, no preguntar más, y no querer saber más, y focalizar la vida en otras cosas... seguramente es difícil porque somos seres sentimentales, nos movemos por sentimientos muchas veces, somos débiles hasta con nosotros mismos. No importa cuanto algo nos dañe, no lo queremos dejar ir hasta no agotar el último recurso en esa "etapa". Me pregunto como hay gente que vive sin culpas, como hay personas que hacen cosas siguen con sus vidas y son felices, me pregunto si realmente lo serán... y como es que a algunos nos cuesta tanto desprendernos de algo para poder comenzar a disfrutar de otras cosas. Algunas veces me pregunto hasta que punto puede aguantar alguien, hasta que punto puede esperar, y creo que hay gente que puedo hacerlo hasta que muere, y cuando lo pienso me da tanto miedo alguna vez llegar a esperar hasta ese punto, quiero que las cosas pasen rápido, y olvidarlas pronto, quizás es mejor que recordarlas y aferrarse tanto a los recuerdos, al final, los recuerdos solo harán que no disfrute cosas futuras que la vida me de. Es tan fácil pensar las cosas, planificarlas, hasta creerlas, pero hacerlas una realidad es muy difícil, es muy complicado, del dicho al hecho... la gente dice que hay que pensar bien las cosas antes de hacerlas, pero para que? para no hacerlas al final, creo que lo que primero uno piensa es lo que realmente siente, quizás no sea lo mas bonito, pero es la realidad, y cuando uno hace la tercera o cuarta cosa que piensa ya se esta mintiendo a uno mismo, se esta siendo desleal con uno mismo, admiro a quienes dicen las cosas y hacen sin pensarlas, seguramente tienen el odio de todos, pero deben tener una paz incomparable consigo mismos, de todos modos, el vivir así es para un ermitaño no para alguien que vive en una sociedad, si no, las cosas no funcionan, la sociedad exige tener filtro para decir y hacer las cosas, si no, seguramente todo seria tan fácil como cerrar una puerta.

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